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Si algo necesitamos es el aire que respiramos, y el turismo de salud en Teruel es una opción estupenda para proporcionárnoslo. Cuando respiramos aire puro, lejos de las ciudades, este entra en nuestros pulmones como una medicina.
Los bosques, enormes generadores de oxígeno y aire puro, son espacios de salud. Eso lo sabemos todos. Pero, ¿sabías que los bosques generan atmósferas que potencian y fortalecen nuestro sistema inmunitario? Es fascinante como la naturaleza se encarga de ayudarnos a recuperar la salud simplemente estando, caminando, respirando.
Esas atmósferas sanadoras que generan los bosques están repletas de fitoncidas, aceites esenciales volátiles producidos por plantas y árboles que no sólo tienen una importante actividad antimicrobiana, sino que también producen efectos relajantes y alivian el estrés. Esto se traduce en que nuestra tensión arterial baja, los latidos del corazón se pausan. Y, lo más importante, estos fitoncidas aumentan el número y la actividad de las células humanas defensivas (conocidas como natural killer cells) y potencian la actividad de las proteínas anti cancerígenas.
Turismo de salud en Teruel: qué debes saber
La atmósfera de los bosques del valle de Olba la forman pinos, carrascas, robles, servales, madroños, acebos, espinos albares, arces, coscojas, jaras, lentiscos, brezos…
¿Y cómo podemos absorber los beneficios de estas atmósferas? Cada uno debe elegir su forma: paseos meditativos, senderismo, bicicleta de montaña, marcha nórdica, trail running, fell running… ¡y porqué no salir a coger espárragos o setas!
Si algo caracteriza a La Casa de Los Moyas es que está totalmente inmersa en la naturaleza, rodeada de bosques de montaña, pero también del bosque de ribera que flanquea las orillas del Mijares, nuestro río. Fresnos, sauces, olmos, álamos, chopos… Nada como un baño en las frescas aguas del río y un picnic bajo los chopos en verano.
La vida sencilla es, sin duda, la vida mejor.
